En algunos casos, se hace un diagnóstico completamente equivocado al basarse en síntomas que pueden ser similares a la condición médica real. En estos casos, un médico puede haber realizado un examen inadecuado y haber hecho un diagnóstico basándose en los resultados negligentes. Esto puede ocasionar que el médico recete medicamentos innecesarios errores en la medicación y, además, ocasiona que la condición médica erróneamente diagnosticada no sea tratada. La medicina alopática, hoy en día, sus diagnósticos están dependiendo de lo que las máquinas, pruebas y analíticas digan. Han perdido lo que antiguamente se denominaba el” ojo clínico”. Por lo tanto ante un diagnóstico equivocado hay un tratamiento equivocado y un enfermo más enfermo.
Ejemplo, niño de nueve meses, a tratamiento con antibióticos variados para sus problemas de amigdalitis de repetición. A la vez le dan a tomar corticoides para el asma, es decir un niño de 9 meses que no puede respirar y con infecciones de garganta repetidas y febrícula alta, pero ¿Por qué ocurre esto?, su pediatra no investiga, solo receta.
El Sistema Test Hematográfico, contempla las enfermedades desde los diversos terrenos. Una misma enfermedad puede estar asentada en uno o varios terrenos. Conociendo estos, se puede erradicar la enfermedad.
La medicina oficial trabaja sobre síntomas, por lo tanto no tiene capacidad de curación. Una vez acallados los síntomas con los diversos medicamentos y sus efectos secundarios, la enfermedad puede tomar otros caminos más complicados para la salud del enfermo.